Todo lo que querías saber sobre el softshell

¿Qué es el softshell?

Se trata de una denominación general para materiales funcionales modernos de varias capas que se utilizan principalmente para fabricar ropa y calzado outdoor, como pantalones deportivos o chaquetas.

El nombre proviene de la combinación de dos palabras inglesas: “SOFT” (blando) y “SHELL” (cubierta o caparazón). De ello se pueden deducir fácilmente sus principales características: resistencia mecánica, impermeabilidad, buen aislamiento térmico, resistencia al viento y transpirabilidad.

¿Un todoterreno imprescindible o un híbrido poco práctico?

La verdad es que el softshell ha perdido algo de popularidad entre el público en los últimos 2 o 3 años, y sus años de mayor auge ya pasaron. Aun así, sigue siendo —y probablemente seguirá siendo durante mucho tiempo— una parte esencial del sistema de capas correcto, el llamado sistema de la cebolla, en el que cumple tanto la función de segunda capa (aislante) como de tercera capa (protectora).

Y precisamente en el hecho de que puede sustituir a una sudadera de forro polar y, al mismo tiempo, proteger de la lluvia y el viento como una chaqueta con membrana, radica su excepcionalidad. Sin embargo, de ello también se derivan sus límites.

El softshell ofrece su mayor valor práctico en climas más fríos o con condiciones meteorológicas variables. Si lo vas a utilizar en entornos cálidos y secos o, por el contrario, en condiciones de frío extremo u otros climas extremos, te toparás con sus limitaciones. Por lo tanto, está claro que para un usuario común (excursionista o senderista) el softshell es sobre todo una buena elección para salidas primaverales y otoñales al aire libre, o como prenda adecuada para nuestros inviernos moderados.

Propiedades del material

La superficie del softshell es suave, elástica y, gracias a la película de poliuretano, repelente al agua. Las gotas de lluvia se deslizan por ella y la nieve no se adhiere.

El material interior suele ser de microfleece en las versiones más cálidas o de punto (jersey) en los modelos ligeros de verano.

Tipos de softshell

Desde el punto de vista de su estructura interna, distinguimos 2 tipos básicos de softshell:

1. Softshell con membrana: tiene una membrana laminada entre la capa exterior y el forro, lo que le proporciona una mejor resistencia al viento y a la humedad exterior.

2. Softshell tejido: por el contrario, está hecho únicamente de fibras textiles mediante un tejido especial y se caracteriza por su buena transpirabilidad, menor peso, gran elasticidad y alta resistencia a la abrasión.

Principales parámetros del softshell

Impermeabilidad – indica la altura teórica de la columna de agua que el tejido puede soportar antes de que penetren las primeras gotas. Según la norma internacional ISO 811, un material se considera impermeable si resiste una presión de al menos 1 300 mm de columna de agua. En el caso del softshell tejido, los valores suelen situarse hasta los 5 000 mm, mientras que el softshell con membrana puede superar incluso los 30 000 mm de columna de agua.

Resistencia al viento – todos los tipos de softshell ofrecen cierta resistencia al viento, pero solo los modelos con membrana destacan por una protección realmente alta. Sin embargo, hay que tener en cuenta que, cuanto mayor sea la resistencia al viento, menor suele ser la transpirabilidad del material.

Transpirabilidad – se expresa con la abreviatura Ret, medida en unidades Pa·m²/W, e indica la cantidad de energía necesaria para evaporar una cantidad determinada de agua. Cuanto menor es el valor Ret (es decir, se necesita menos energía para evaporar el agua), más transpirable es el tejido. Aún hoy también se utiliza el parámetro de permeabilidad al vapor de agua, expresado en g/m²/24 h, que indica cuántos gramos de vapor puede evacuar el material en un día.

Para mayor claridad, añadimos una tabla que compara la transpirabilidad y la permeabilidad al vapor de agua:

También resulta muy interesante comparar los valores aproximados de producción de vapor corporal según la intensidad del esfuerzo con la permeabilidad al vapor de las chaquetas:

Resistencia térmica – es un parámetro muy importante que, por desgracia, no suele aparecer en el 99 % de los productos de softshell. Sin embargo, esta información puede obtenerse directamente del fabricante. La resistencia térmica se abrevia Rct y se mide en unidades K·m²/W. Expresa la diferencia de temperatura entre la superficie exterior e interior del tejido. Esto significa que cuanto menor es este valor, mejor aísla el material y menos calor corporal se escapa hacia el exterior.

Cuidado adecuado

Toda prenda funcional debe recibir la atención necesaria en cuanto a su mantenimiento y almacenamiento. Es lo mismo que con un coche: si lo revisas regularmente, rellenas los líquidos y lo tratas con cuidado, te servirá bien y durante mucho tiempo (siempre, claro, que no sea un producto de baja calidad desde el principio).

De vez en cuando, dale a tu ropa de softshell un lavado a fondo con un detergente especial para prendas funcionales, preferiblemente uno diseñado específicamente para softshell. Evita los detergentes convencionales, ya que pueden dañar irreversiblemente los tejidos técnicos. Y ya que estás lavando, no olvides impregnar la prenda después, idealmente con un producto específico para softshell.

Como recompensa tendrás hombros, piernas y, posiblemente, perneras secos, mayor durabilidad, mejor resistencia del color, protección frente a los rayos UV y menor acumulación de suciedad. Y eso sin duda vale la pena, ¿no crees?

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Fuentes:

mackenzienz.com, gore-tex.co.uk, highpoint.cz, treking.cz, softprodeti.cz